Descubrimos cómo fue la cena maridaje con las Bodegas PradoRey y la cocina de Palacio
El pasado jueves 22 de febrero tuvimos el placer de recibir en nuestro restautante a las Bodegas Pradorey con sus vinos de la Ribera del Duero.
El conductor de esta velada fue Jesús, de Dimarca, quien nos presentó a la bodega y explicó muy bien cada una de las características de estos ricos vinos.
Pradorey: Historia e Innovación
Esta bodega, además de hacer espectaculares vinos, forma parte de la historia de nuestro país. En el año 1503, la finca en la que se ubica, se convirtió en Real Sitio y el lugar fue frecuentado habitualmente por la realeza.
“El prado del rey” además de ser el lugar preferido para la caza en España, fue el sitio donde artistas como Rubens y Lope de Vega supieron mostrar su talento ante los reyes de Castilla y España.
En cuanto a su metodología, su premisa es la innovación: se atrevieron a plantar viñedos en latitudes consideradas imposibles, fueron los primeros en España en elaborar un vino clasificado como“roble”y renovaron la tradición de los claretes de la zona con su Pradorey Rosado. También fueron pioneros en elaborar uno pálido en la Ribera del Duero (Lía Pradorey). Podemos decir que Pradorey también ha hecho historia con sus caldos y que es una bodega que marca tendencia en nuestro país.
A continuación, os contamos los vinos tuvimos el placer de degustar, y los platos con los que maridamos cada uno de ellos.
PradoRey Lía Rosado & Royal de Zanahorias y Guisantes
Lía es uno de los vinos más innovadores de Pradorey. De color pálido al estilo Provence, fue el primer vino blush rosé de la Ribera del Duero.
Vista: Rosa claro, limpio y brillante.
Nariz: Intensidad alta, predomina la fruta roja como la fresa y la cereza. Esencias de flores como la rosa y el jazmín. Fondo fresco y agradable.
Boca: Sabroso en boca. Acidez muy equilibrada con el alcohol. Retrogusto afrutado que recuerda a las frutas maduras. Largo y persistente.
Acompañamos este innovador vino con nuestro Royal de Zanahorias y Guisantes. Sirvió para empezar la cata de forma atrevida, ya que en primer lugar, sorprendió su presentación por el juego entre el chupito y el plato. Lo que realmente sorprendió fue su rico sabor con un toque dulce y su “chispeante” textura crujiente. “Una golosina”, nos comentaro los asistentes.
PradoRey Tres Barricas Blanco & Ensalada de Tubérculos y Bacalao
Un blanco persistente, complejo y equilibrado que ha consquistado los paladares de la crítica y de los aficionados.
Vista: Amarillo verdoso, intenso y muy brillante.
Nariz: Aromas varietales, maduros, tropicales e intensos, la complejidad aromática se debe a la sensualidad de los aromas de la barrica mezclados con los varietales de la uva, dando así un elegante perfume.
Boca: Muy agradable, untuoso, carnoso, graso y con un largo posgusto de fruta exótica y toques amielados. Muy persistente, complejo y equilibrado.
Para este equilibrado vino, quisimos acompañarlo de una ligera pero muy atractiva ensalada en la que el bacalao y los tubérculos daban el toque de sabor y color que compensaba a Lía y lo convertían en una pareja perfecta.
Pradorey Finca Valdelayegua Tinto & Cremoso de Cochinillo y Pularda
Procede de las mejores uvas del Pago Valdelayegua, un viñedo que aporta cualidades únicas al vino.
Vista: Color rojo picota, con intensos matices azulones, capa intensa y brillante.
Nariz: Intensidad alta, donde predomina la fruta roja madura, con sensaciones dulzonas aportadas por su paso por barrica. Fondo mineral, balsámico y complejo
Boca: Sabroso en boca, con taninos redondos y frescor agradable al paladar. Final sabroso, aterciopelado y con gran concentración de fruta.
Este vino, que marida tan bien con el cerdo ibérico, lo acompañamos con un Cremoso de Cochinillo y Pularda.
Esta curiosa forma de elaboración aporta muchos aromas sutiles. La soja y el sésamo envuelven al plato, convirtiéndolo en un sabor único. La textura cremosa se equilibra con un toque crujiente de mucho carácter, y la cebolla morada le aporta frescura.
Adaro Tinto & Pastela de Cordero en su Jugo
Este vino es un homenaje al fundador de la marca: Javier Cremades de Adaro. Su etiqueta reza: “La osadía de creer en uno mismo”. Antes de probarlo…¡ya inspira!
Vista: Color rojo picota, con intensos matices azulones, capa intensa y brillante.
Nariz: Intensidad alta, fusión de aromas afrutados, destacando la fruta roja, ensamblados con los aromas terciarios como la vainilla y el regaliz, aportados por su crianza en barrica.
Boca: Elegante, sabroso y fresco. Combina la fruta madura con taninos aterciopelados, provocando un paso por boca muy agradable y un final muy elegante.
Acompañamos este mimado vino con con una Pastela de Cordero. Una combinación de especias muy bien equilibradas, capaces de realzar el sabor del cordero. Su interior, contrasta elegantemente con el crujiente de la pastela. “Una delicia” según las personas que estaban en la cata.
El final dulce
Para finalizar la cena, nos gusta ofreceros un toque dulce. Ofrecemos nuestros petit fours mientras acabáis de degustar y comparar los vinos.
En esta ocasión, unas lascas de chocolate blanco especiadas y palitos de chocolate a la naranja. Irresistible hasta para los no golosos. 😉
A continuación, os mostramos unas imágenes que recogen el buen ambiente de la sala al final de la cata.
¡Nadie se quería ir de nuestro restaurante!
Muchas gracias a todos los asistentes e interesados en asistir. Nuestro aforo es limitado y no podemos satisfacer a todas las personas que quieren venir, por lo que os recomendamos que estéis atentos a nuestras redes sociales y reservar vuestro ticket para las catas lo más rápido posible.
También queremos agradecer, como siempre a nuestro equipo de cocina, personal de sala y recepción, por realizar con tanto mimo su trabajo.
Por su puesto, gracias a las bodegas Pradorey por traer hasta Plasencia lo mejor de la Ribera del Duero.